El viento sopla con fuerza en la ensenada barbateña. Ni el
sol ni el levante quisieron perderse la llegada de Cristo Rey a las calles,
dando paso a la Sema Mayor. Unos minutos antes de dar las cinco de la tarde,
comenzaban los actos previos que la Cofradía del Amor tenía preparado en el
Domingo de Ramos.
Se entregaron unos obsequios a varios cargadores de la cuadrilla
de ACHE juvenil. Se hizo lectura de un agradecimiento especial para las mujeres
que había confeccionado la indumentaria del Cuerpo de Acólitos de Virgen de La
Paz que se estrena en el día de hoy, cuyo diseño ha corrido a cargo del
vestidor de la Cofradía Eusebio Romero.
El director espiritual bendijo las indumentarias y los
ciriales, que contaron con la ayuda del grupo joven. Posteriormente, tras
ordenar el cortejo, la cuadrilla juvenil procedió a la lectura de un escrito y
la entrega de unos detalles de agradecimiento a sus capataces, así como el
obsequio de un martillo bañado en plata.
Todo listo y preparado para pedir la venia que, una vez
concedida, inauguraba la Semana Santa barbateña y el ciclo de la nueva Junta del
Amor encabezada por Pedro Jiménez.
Una plaza abarrotada esperaba en la puerta lateral de San Paulino para ver salir la Entrada Triunfal en Jerusalén, que
encaró la calle San Paulino para ir camino de la cuesta. Cuando sonaba Mi
Amargura y la cuadrilla demostró su estado de madurez, a pesar de la juventud.
Cádiz Cofrade en Agustín Varo y a enfilar la recogida, previo paso por Tribuna
en avenida del Mar.
El levante soplaba fuerte y por tal motivo no pudo colocarse
la tradicional palma en la mano de la talla de Cristo. De hecho una de las
potencias se vio afectada por el viento y tuvo que ser repuesta en alguna
ocasión.
No obstante, esto no fue óbice para que se pudiera disfrutar
de un Domingo de Ramos esplendoroso en un cortejo de una Cofradía repleta de
niños y de ilusión por mejorar.
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